Cambiamos las pequeñas cosas que quedan a nuestro alcance con la esperanza de llegar a cambiar también las grandes, aunque éstas, demasiado a menudo, no dependan de nosotros.
Pero seguimos intentándolo.
Algún día, quizá, lo consigamos.
Nada más que de todo un poco: reflexiones, opiniones y dispersiones o lo que me pasa por la cabeza.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Morning Sun (Edward Hopper, 1952)

Nunca hay que perder la esperanza. Muchos pequeños cambios pueden convertirse en un cambio enorme
ResponderEliminar¡Feliz y dulce semana!
http://losdulcessecretosdecuca.blogspot.com.es/
Esa es la idea ;)
ResponderEliminarFeliz y dulce semana a ti también.
Eso es lo que nos gusta pensar a todos, yo creo. Biquiños!
ResponderEliminarQuizás... Estoy un poco escéptica últimamente, la situación que tengo me lleva más a cambios radicales, grandes. Pero estoy indecisa...
ResponderEliminarUn abrazo Zazou
Yo no me siento capaz de cambiar nada. Cada vez que lo intento, lo estropeo más. Será "inhabilidad" mía, :( . Abrazos.
ResponderEliminarÚltimamente me ha tocado cambiar muy a mi pesar, y me he dado cuenta que puedo hacerlo si depende de mi, pero que ofuscarme para cambiar lo que no esta en mis manos tampoco me lleva a ningún lugar
ResponderEliminarBesos